Abro los ojos, cada mañana que me levanto, para encontrar la verdad que sé que está ahí. Tengo la suerte de respirar, tengo la suerte de sentir. Me alegra despertar, estoy contenta de estar acá. Con todas las de este mundo, todo es dolor, todo es mentira y todas son decepciones, pero todavía siento una sensación de libertad. El día que no esté más y el día que me vaya, nunca me voy a arrepentir de un minuto de mi vida. Aprendí de la alegría y aprendí de las lágrimas. Caminé sobre la oscuridad y ahora encontré la luz.